martes, 6 de diciembre de 2016

La Ley Wert, gasolina del diablo...




La Ley Wert es gasolina del diablo para que arda por los cuatro costados nuestro sistema público de enseñanza. ! No te equivoques !, no creas que se trata de estándares o reválidas. La enseñanza es el filón de oro que arañan desde todas partes las empresas privadas de educación. Quizás el mas grande sector económico que aun es responsabilidad pública. Se trata de una progresiva privatización enmascarada.

La secuencia es sencilla:

1ª FASE "DETERIORO": Invierto menos dinero, adelgazo los programas de enseñanza, quitamos peso a los exámenes, inflamos las notas con redondeos, ocupamos a los profesores con tareas burocráticas y les obligamos a trabajar mas horas en el aula, sobrecargándolos, aumentamos el numero de alumnos aula, quitamos apoyos y desdobles, desinflamos programas educativos de calidad.

2ª FASE "CONFIRMACIÓN DEL DETERIORO": Impongo exámenes o reválidas o pruebas de cualquier tipo que actúen como notario de defunción. Una vez constatado dicho deterioro entonces...

3ª FASE "ABANDONO Y REFORMA": Los que puedan abandonar el barco antes de su hundimiento saltarán a las balsas salvavidas preparadas al efecto en la empresa privada de enseñanza y los que no puedan se quedarán en un barco sin capitán y haciendo agua con sucesivas reformas de asfixia y destrucción.

Hay un interés explícito en socavar la enseñanza pública y ratificar su fracaso frente al modelo privado. Hay un interés en no invertir dinero en la enseñanza pública y aplicar recortes y sacar dinero de ella para otras partidas presupuestarias. Hay un interés en crear estructuras de fidelidad y clientelismo con las instituciones de enseñanza privadas, son un negocio, con las administraciones que fomentan esos intereses y les bombean a diario nuevos clientes ante el menosprecio de la enseñanza pública.

Hay maldad en todo eso, así de simple. Hay perversión en retirar los apoyos educativos, hay perversión en aumentar los ratios, hay perversión en insertar la religión en el programa educativo quitando horas a otras materias. Hay perversión en la usurpación de tiempo de los profesores sometiéndolos a obligadas tareas burocráticas estériles. Hay perversión en la sumisión de los claustros ante el aumento de poder de los órganos directivos...

Hay perversión en la planificada destrucción del sistema público de enseñanza. ! Entérate ya ! y ! Defiende lo tuyo !. !Lucha!